¿Quisiste ser mi madre,
eres madre del ser que yo aventuro?
Ana María Lahitte
I
No la dejaban ensuciar cuando era chica
se perdía las rondas por miedo a caerse,
las escondidas por miedo a que le toque contar,
se quedaba quietita
Cuando creció se empezó a mover
a irse lejos, a ensuciarse
con barro, sangre, semen, tinta, palabras, malas palabras
se dio cuenta de que no era tan grave
no hubo ningún castigo imposible de soportar
descubrió que lo terrible hubiese sido quedarse
pura, blanca, inmóvil.
II
Quizás otra hija hubiese sido
mejor para esta madre
otra que abrazara más seguido
dijera palabras melosas
y un sí grande como una casa
(como esa casa de la niñez
que nunca más hubo)
y estuviese sonriente cada día
y luego de algún exabrupto
dijese perdón-lo siento-no volverá a ocurrir
una hija ama de casa
muy cocinera
muy enceradora de pisos
muy modosita
una hija siempre hija
para una madre siempre madre
quizá, pero ya se sabe
que los desencuentros son más
las decepciones son muchas
y las miradas suelen conenctarse
sólo algunas veces
o nunca
III
Hubo un tiempo
en que la madre fue madre de su hija
solían encontrarse en un patio fresco
o en un porche debajo del paraíso
Una mañana se cruzaron de veredas
y se miraron con prudencia
(por no decir desconfianza)
y así estuvieron días meses años
Una noche la hija
fue madre de su madre
la cuidó la mimó y le habló
le dijo que nunca la dejaría
y otras cosas que dicen las madres
cuando los hijos lloran y tienen miedo
Una tarde
una bella y apacible tarde
fueron dos mujeres
dos mujeres
que se miraron a los ojos.
…
esposa de
calentar la pava, sacar los pajaritos al sol
alimentar al gato y los perros
baldear el patio
los mates
los mandados
casi la única salida
no, también está el médico
la visita de Sara algún domingo
el rosario, llevar a la virgen por las casas
y el Tito que no quiere
es que trabaja todo el día
llega cansado y no le gusta salir
hacer un viajecito
es que el Tito no quiere
está sin ganas
ni una caricia me da
pobre Tito, pobre…
….
Tiene
hermanos, sobrinos
alguna tía vieja que todavía visita
la tranquilidad de haber cuidado
a sus padres cuando la necesitaron
tiene
un trabajo estable,
un sueldo que le alcanza
cada mes para vivir
tiene
amigas, compañeras
con las que suele reunirse
a recordar viejas épocas
tuvo
años de soledad
ahora tiene
un hombre que la quiere y acompaña
tiene
una casa hermosa
con flores y árboles frutales
con patio grande
para sentarse al sol
tiene
la heladera bastante completa
el placard con ropa buena
zapatos confortables
hijos
no tiene
…
Las causas pendientes
Digo que mañana sería bueno ir a…
hacer…
acomodar…
meterme de lleno en…
me asusto cuando me descubro engañándome
una y otra vez como un juego circular
del que a veces escapo pero
al que siempre vuelvo
y me juro que no pasará más
me reto a mi misma
me pongo penitencias
absurdas innecesarias
me interrogo
me confieso
me torturo
con preguntas imágenes
que me llevan sin más a esos días
y vengo yo vestida de Freud
mirándome objetivamente
diciéndome:ahá
y la otra, la que soy
mira fijamente el péndulo y se va
envuelta en ayeres
y llega el patio, el jardín verde
el laguito, los pececitos naranjas
el pasillo, la casa pequeña
el licor de oro
lo que maravillosamente está
lo que sostiene este esqueleto
le da forma
y ya no se si son las causas pendientes
lo que vine a buscar
o sentirme así con energías para
pensar que mañana seguro que…
ELIZABETH MOLVER nació un 7 de octubre que de seguro fue soleado y celeste a pesar del año: 1969. Sí, en la provincia de Bs As. Según los ojos (La Carta de Oliver, 2004); Postales personales (Macedonia Ediciones,2008) Mientras Tanto (Plaqueta, 2007); Mujeres en un cuaderno borrador (Macedonia Ediciones, 2011) son sus publicaciones hasta el momento.
Sus poemas han sido difundidos en diversas revistas argentinas y latinoamericanas; conjuga con su tarea docente, la coordinación de talleres y la participación en jornadas feriales de lectura y escritura. Obtuvo el premio «Viva lectura 2011» en la categoría LECTURA ENTRE DOCENTES.
En el año 2011 fue invitada al Encuentro Internacional Mujeres Poetas en el País de las Nubes, que es desarrollado por el gobierno del Estado de Oaxaca, en México.
Los poemas aquí publicados conforman su último libro, en el que indaga en el perfil de tantas mujeres como posibilidades de descubrirlas nos permitamos. Ellas están ahí, afuera, ocupando las calles, las plazas, las casas, las escuelas, los sótanos del trabajo esclavo, invisibilizadas, arraigadas, amadas, masacradas…mujeres que están también
adentro.
Para seguir escuchando a Eli…